viernes, 14 de marzo de 2025

A donde vayas

Eres la risa que aún resuena en las calles vacías,
el eco de una broma compartida bajo las luces del teatro,
la sombra que baila conmigo
cuando nadie más entiende la locura.

Eres mi faro en la oscuridad,
mi refugio cuando la tormenta se vuelve demasiada,
cuando el mundo pesa y la locura se siente de nuevo,
cuando solo queda el silencio
y necesito que alguien lo rompa con un "todo estará bien".

Hemos sido el caos y la ternura,
los susurros cómplices en madrugadas eternas,
los pasos descalzos corriendo hacia lo desconocido.
Nos hemos encontrado en cada despedida,
nos hemos reído de la vida hasta que nos dolieron las costillas,
y aún en la distancia, sigues aquí,
en cada rincón donde la memoria brilla.

A veces soy un fantasma,
perdido entre mis propios demonios,
pero si me llamas, siempre acudiré.
Porque una amistad como la nuestra
no entiende de relojes ni de kilómetros,
es una casa sin puertas,
es un abrazo sin fin.

No importa cuánto tiempo pase,
ni cuántos escenarios nos separen,
siempre serás mi risa favorita,
mi historia compartida,
mi certeza de que hay almas
que jamás se sueltan.

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